13/02/2011. II Carrera Popular de Balazote

No sé por donde empezar… Si acaso por el final… Moraleja: Si te vas de juerga el día antes de una carrera no te quedes a medias…. En efecto, si te has pasado con las copas, tranqui que no te podrás levantar. Lo malo es estar pasándotelo bien y al mismo tiempo preocupado pensando en el día siguiente. ¡¡Es que lo queremos todo…!!

Después de una gratísima reunión familiar de casi doce horas de duración desde el mediodía del sábado, con unos primos que no veía en años, y en la que nuestros niños jugaron hasta la saciedad, tras la copiosa ingesta de un sinfín de entrantes, dos platacos de arroz con bogavante, dulces, licores y bastantes copas –hermosos y digestivos donostis-, que con el devenir de las horas consumí decrecientemente de forma responsable pero sin llegar a una expeditiva conclusión, y con algún que otro cigarrillo en mis pulmones -¡maldito vicio!-, me recogí por fin pasada la medianoche en el sobre sin cogorza destacable pero con una lavadora por estómago…

Y a las 8:45 ahí estaba yo en la churrería de la Avda de España con el resto del Dosquince, vestidito con mi chándal y nadando entre cafés, esperando ver como reaccionaría mi body ante el semejante castigo que se le avecinaba, mientras la peña arremetía contra el presi Paco “ZP” Carratalá que con buen criterio había anunciado prematuramente su ausencia de la prueba por tener planeado hacer el día de antes lo mismo que un servidor, pero saliendo a la noche y sin freno. Al menos alguien juicioso…

Un gran club, en una mañana perfecta...

Habiendo llegado a Balazote algo justitos de tiempo y después de la recogida de dorsal, tenía claro que no era cuestión de sufrir, que llevaría un trote digno para culminar el recorrido con un paseete. Al fin y al cabo es una carrera de categoría C. Empecé despacito junto a Gossi y Juan Calderón, y todo apuntaba bien al ser la salida pendiente abajo, ¡buen comienzo!, hasta que pasados unos 300 mts. cambiamos de trayectoria.

El temido inicio...

Comenzamos una linda subida por el pueblo que al principio no me planteó mayor preocupación y la afronté al lado de Pablo, Isabel y Paco Lombardía, hasta que doblamos una esquina y pudimos contemplar con asombro una hilera de cerca de kilómetro y medio de corredores, todos cuesta arriba dirección a las antenas del pueblo. En ese momento me salió un silbidito de resignación, recordando la carrera anterior de Elche de la Sierra, todo un susto que me hizo parar y ponerme a andar. Sin embargo por suerte no me encontraba tan mal como esperaba y pude enlazar cerca del final de la cumbre con Paco Fernández. Juntos emprendimos una esperada y larga bajada que nos dio un nuevo brío. Enlazamos con el “Torpedo Minaya” y lo sobrepasamos, ya que todavía está en rodaje.

Junto a Paco Fernandez,
una agradable compañía

Poco después cruzamos la carretera hasta llegar a la Vía Verde. Allí Paco me pidió que siguiera delante ya que iba a recular pues también había probado las mieles del exceso la noche anterior junto al presi, aunque pudo retirarse a tiempo. Una vez en solitario, en el mismo trayecto de ida y vuelta de la vía, increíblemente pude mantener un ritmo vivo entorno a 5,20 min./km., pasando corredores y amigos como Tony y Julián del Cervantes Búfalos, mis vecinos del Saycu Ernesto y Aurelia y mi compa José Manuel.

Exultante tras pasar los males...

Así hasta llegar de nuevo al pueblo, donde la organización nos tenía reservada una última sorpresita: nueva subida de más o menos un kilómetro callejeando un ratillo hasta la meta, donde nos esperaba mi buen amigo el inefable e irrepetible speaker Paco Villaescusa.

El sprint final...

Al final, el hecho ir de menos a más, o mejor dicho de muy menos a bastante más, me ha resultado bastante fructífero. Independientemente del estado físico en el que llegaba a la carrera, esto me vuelve a plantear la –eterna- reflexión de ir calentando para próximas citas un poquito más y mejor antes de empezar cada prueba -vamos, lo que ya sabemos todos-

La organización ha estado sobresaliente, con avituallamiento suficiente en todo el recorrido y hasta parada de la circulación vial en toda una carretera nacional por parte de Benemérita en aras de la consecución del evento. Al término bonita bolsa deportiva con fruta, zumos, agua, chulos calcetines técnicos y el pin de San Blas. Y sin olvidar en el pabellón los dos hermosos grifos de rica cervecita fresca que a esas alturas nos resultan como el elixir de los dioses… ¡Hasta nos hicimos unas fotos en el podio!

Nos falta podio...

Y hablando de fotos también hay que destacar al cuñado de Blas que le ha hecho una enorme competencia al fotógrafo oficial Gabi.

Respecto a la participación de Dosquince, esta ha sido apoteósica, habiendo realizado nuestra mejor clasificación en una prueba del circuito, con once equipos por detrás.

Repitiendo el primer puesto de EDLS Fran Corominas con 55:25, a un escalofriante ritmo de 4,16 min. el km., tras él Daniel con 57:09 a 4,24, Jorge con 57:30 a 4,25, Juan Lorenzo con 59:32 a 4,35, Dani Cifo con 1:00:21 a 4,39, Juan Ramón con 1:00:44 a 4,40, Paco Aparicio con 1:06:07 a 5,05, José Luis “Willy” con 1:07:09 a 5,10, Dioni con 1:08:19 a 5,15, Luis con 1:08:54 a 5,18, Blas con 1:08:19 tb a 5,18, Sebas “Troteitor” y Pedro ambos con 1:09:52 a 5,22, José Carratalá con 1:10:53 a 5,27, un servidor con 1:12:14 a 5,33, José Manuel con 1:14:00 a 5,42, Paco Fernández con 1:15:27 a 5,48, José Luis “Torpedo Minaya” con 1:19:54 a 6,09, Paco Lombardía, Isabel y Pablo con 1:22:15-6-7 respect. a 6,20 y Gossi junto a Juan Calderón con 1:31:17 a 7,01. Todos ellos tiempos oficiales, ya que los reales no salen en la web –y a pesar de que la distancia real parece que fue inferior a la oficial de 13 kms., regocijémonos con nuestros endiablados ritmos-.

Con estos 23 runners también casi igualamos nuestro mayor número de participantes en una carrera, de no ser por alguna mencionada baja de última hora que se dejó llevar por el Saturday Nitgh Fever…

Fotos // Clasificación // Estadisticas // Recorrido